Asegura un regreso a clases exitoso con estas opciones de meriendas que nutrirán el cuerpo y la mente de los niños y niñas.
El regreso a clases después de las vacaciones de mitad de año es un momento emocionante para los niños y, a la vez, un desafío para muchos padres. Volver a la rutina escolar significa no solo ajustar los horarios y organizar las actividades diarias, sino también planificar las comidas y meriendas que mantendrán a los pequeños saludables y con mucha energía.
Entendiendo que uno de los aspectos más cruciales y, a menudo, estresantes para los padres es decidir qué incluir en las loncheras de sus hijos, aquí presentamos algunas opciones de meriendas que, no solo ayudarán a mantener a los estudiantes concentrados y llenos de energía, sino que también promoverán hábitos alimenticios positivos.
Y es que, el llevar a la escuela una merienda saludable, en lugar de alimentos empaquetados es esencial por varias razones:
Mejoran del rendimiento académico: Una buena nutrición está directamente relacionada con una mejor concentración y capacidad de aprendizaje. Los estudiantes que comen saludablemente tienden a rendir mejor en sus estudios.
Mantienen niveles de energía: Ayudan a evitar el cansancio y la fatiga, manteniendo a los estudiantes activos y alerta durante su jornada escolar.
Prevención de enfermedades: Una alimentación balanceada fortalece el sistema inmunológico, ayudando a prevenir resfriados y otras enfermedades comunes.
Para que una merienda sea considerada saludable, debe tener un balance adecuado y contar con estas características:
Balance nutricional: Las meriendas deben incluir una combinación de proteínas, carbohidratos complejos, grasas saludables, vitaminas y minerales.
Evitar azúcares y grasas saturadas: Es importante reducir la ingesta de alimentos procesados y azucarados, que pueden causar picos de energía seguidos de caídas bruscas y falta de concentración.
Preparar meriendas saludables no tiene por qué ser complicado. Algunas recetas rápidas, fáciles y deliciosas pueden ser:
- Los batidos de frutas: Estos pueden ser preparados con las frutas favoritas de nuestros niños, yogur natural y un poco de leche o agua para un batido refrescante y nutritivo.
- Bocadillos de pavo, queso y pan: Una merienda sencilla y deliciosa que proporciona proteínas y carbohidratos complejos.
- Rollitos de tortilla con vegetales y hummus: Enrollar una tortilla con hummus, zanahorias ralladas y espinacas para una merienda llena de sabor y nutrientes.
- Ensalada de frutas con yogur natural: Combinar varias frutas frescas con una cucharada de yogur natural para un postre saludable y delicioso.
- Frutas con mantequilla de maní: Cortar rodajas de manzana o plátano y untarlas con mantequilla de maní natural para un bocadillo rico en proteínas y fibra.
- Avena con frutas y nueces: Preparar avena y añadirle frutas frescas y un puñado de nueces para una opción que se puede disfrutar tanto fría como caliente.
Además, involucrar a los niños en la preparación de sus propias meriendas puede ser una excelente oportunidad para enseñarles sobre nutrición y la importancia de elegir alimentos saludables. Permítales ayudar a cortar frutas, untar mantequilla de maní o mezclar ingredientes para que se sientan parte del proceso y estén más dispuestos a disfrutar de sus meriendas.
Finalmente, recordemos que el ejemplo es la mejor manera de enseñar. Si los padres también optan por meriendas saludables y mantienen una alimentación balanceada, los niños seguirán su ejemplo y adoptarán estos hábitos positivos con mayor facilidad.
Esperamos que estas ideas y consejos sean útiles para hacer del regreso a clases un periodo lleno de energía, salud y aprendizaje continuo.